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MÉTODOS Y TÉCNICAS DE INVESTIGACIÓN EN PSICOLOGÍA


En psicología, como en las demás ciencias, se plantean hipótesis (en su caso sobre las causas de la conducta humana) que deben ser contrastadas para verificar su validez. Diversas técnicas son utilizadas para la formulación y contrastación de hipótesis. Podemos dividirlas en dos grupos: técnicas de descripción y técnicas experimentales.
  1. Técnicas de descripción. Las técnicas descriptivas permiten describir o registrar de modo preciso los fenómenos objeto de estudio; por ejemplo, las características de un individuo, de una situación o de un grupo. Las hay de varios tipos:
  • Estudio de casos. Consiste en reunir información minuciosa sobre una persona o unas pocas personas con el fin de encontrar en su comportamiento aspectos que puedan explicar conductas generalizadas. Así, por ejemplo, es representativa del estudio de casos la experiencia llevada a cabo con Geni (1970), quien a los trece años no sabía hablar porque desde los veinte meses había vivido encerrada en una pequeña habitación sin poder comunicarse con nadie. Uno de los psicólogos que trabajó con Geni durante nueve años, escribió un diario detallado de los progresos que la niña fue haciendo en cuanto al aprendizaje del lenguaje, el modo que tuvo de ir relacionándose con el personal del hospital y otros aspectos de su desarrollo. Este informe sobre el caso de Geni ha servido a muchos psicólogos para entender cómo la gente aprende a hablar.

  • Cuestionarios. Son utilizados cuando se necesita información sobre un grupo grande de personas, ya que no es válido generalizar la experiencia de una persona a poblaciones enteras. Básicamente los cuestionarios consisten en una serie de preguntas que el/los encuestado/s debe/n responder. Los hay de respuesta única y de respuesta múltiple; también de respuesta libre (abiertos) o de respuesta obligada (cerrados); incluso existen los que prescinden de las preguntas y en su lugar piden el pronunciamiento del encuestado sobre un tema o asunto general.
  • Entrevista. Es una de las técnicas favoritas de los psicólogos: suele pensarse en ella como un instrumento preciso y cerrado, como una especie de encuesta oral al estilo de las periodísticas Sin embargo, en psicología se prefiere la entrevista cualitativa o en profundidad. Ésta consiste en una serie de encuentros entre el/la entrevistador/a y los/as informantes, encuentros dirigidos a la comprensión por parte de los primeros de las perspectivas, experiencias y vivencias de los segundos, expresadas con sus propias palabras.
La clave de una buena entrevista siempre está en el/la entrevistador/a, que nunca adoctrina, ni trata de convencer, sino que escucha y aprende a decidir sobre la marcha qué preguntas hacer, cuándo y cómo.
A veces se usan cuestionarios y entrevistas en una misma investigación. Combinando estos dos enfoques se consigue tanto profundidad como amplitud
  • Observación natural. Al igual que los biólogos estudian, por ejemplo, las conductas alimenticias de las ardillas en su ambiente natural, los psicólogos observan el comportamiento humano en colegios, en el metro, en supermercados, en los bares o en cualquier ambiente natural que sea adecuado para la población y el comportamiento que se estudia.
Los investigadores realizan un registro meticuloso de sus observaciones, bien mediante anotaciones escritas, bien mediante grabaciones en vídeo. El posterior análisis de todos estos registros puede ofrecernos una valiosa información sobre el comportamiento de la gente en situaciones de la vida real.
Es muy importante tener en cuenta que los métodos descriptivos no explican la conducta, únicamente la describen. Precisamente por eso no estamos autorizados a establecer relaciones de causa – efecto entre los sucesos observados. Estos métodos nos ayudan a formular hipótesis que posteriormente serán contrastadas mediante experimentos


En estas escenas vemos (superior) a un grupo de adultos golpeando violentamente
a una muñeca de plástico y a niños comportándose agresivamente con la misma
muñeca (centro e inferior) tras haber visto la escena de arriba
b. Técnicas experimentales. En psicología se diseñan experimentos para probar hipótesis que intentan determinar la relación causa – efecto entre un suceso y la conducta de un sujeto. En los experimentos se manipula un aspecto de una situación (variable independiente) y se observa el efecto que causa sobre un aspecto del comportamiento (variable dependiente). La variable dependiente “depende”, por tanto de la independiente, que es la que el experimentador puede controlar.
Un experimento bien planificado necesita contar con dos grupos de sujetos: un grupo experimental y un grupo de control. Estos dos grupos serían iguales en todos los aspectos excepto en su exposición a la variable independiente: el grupo experimental es expuesto a los efectos de la variable independiente mientras que el grupo de control no lo es.
Posteriormente, se comparan los resultados de ambos grupos. Si el grupo experimental, que ha sido expuesto a la variable independiente, se comporta de forma distinta al grupo de control, podemos asumir que dicha variable es responsable de la diferencia. Si no tuviéramos un grupo de control, no sabríamos si otros factores, como el mero paso del tiempo, fueron responsables del cambio de comportamiento observado.
Veamos con un ejemplo cómo funciona el método:
Un grupo de psicólogos está interesado en estudiar el comportamiento agresivo de algunos niños. En primer lugar, los científicos utilizan alguna técnica descriptiva (por ejemplo, la observación del comportamiento infantil en ambientes naturales como la casa, el colegio, etc.) y llegan a plantear una hipótesis: el comportamiento violento observado es consecuencia de la imitación de las conductas agresivas que los niños ven en los adultos. En tal caso, se pueden prever las siguientes consecuencias: los niños que vean a adultos actuar violentamente, copiarán su comportamiento y se mostrarán violentos, mientras que los niños que no observen tales modelos, no se comportarán agresivamente.

Para probar la hipótesis, los psicólogos deben establecer al menos dos grupos de sujetos experimentales: un grupo constituido por niños y niñas que van a ver a una persona mayor golpeando violentamente a una muñeca (grupo experimental) , y otro compuesto por un número igual de niños que van a ver a una persona mayor jugando tranquilamente con la misma muñeca (grupo de control). Ver al adulto comportándose violentamente con una muñeca o jugando tranquilamente con ella es la variable independiente, el hecho o suceso que los experimentadores manipulan a su gusto. El comportamiento agresivo o pacífico de los niños es la variable dependiente, o sea, el efecto que la variable independiente tiene sobre la conducta de los niños. ¿Cuándo quedará confirmada la hipótesis? Si los niños y niñas del grupo experimental se muestran agresivos con la muñeca cuando, tras ser expuestos durante cierto tiempo a la variable independiente, se les deja jugar con ella, mientras que los niños y niñas del grupo de control se muestran pacíficos en sus juegos con ella. No obstante, siempre quedará la incógnita de si la relación causa-efecto establecida por un experimento diseñado en el laboratorio se puede generalizar a la vida real, donde el control de las variables es imposible.

¿Qué conclusiones se pueden extraer, desde el punto de vista científico, de la siguiente noticia?


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